JOSEP MONCADA “FEMMES”
Aunque su medio natural era la tierra, también me contó su viaje con el viento a través del mar. Me dijo que el agua es dulce, que te envuelve y te protege, te refresca y te recibe como un invitado especial. Me comentó que el agua del mar era salada y esto en un principio no le había gustado, aunque realmente esto fue lo que la salvó de no caer dentro del océano. La sal le entraba en los ojos, esto fue lo que la mantuvo despierta hasta que llegó a tierra firme. Ella de alguna forma me decía que aunque por el camino nos encontremos cosas desagradables como la sal, siempre tienen un sentido y a menudo este se descubre con el paso del tiempo. Lo que son impedimentos hoy, mañana se convierten en enseñanzas necesarias y duras de aprender.
Querida Florecilla, ahora que ya me has enseñado lo que querías, ya puedo nadar por el océano de la vida. De todo corazón gracias.
Josep Moncada, pintor de Menorca.